sábado, 6 de junio de 2009

Algunos "dólares" por el camino: Perú

A esta altura de "la pelea", las cosas me siguen sorprendiendo. He querido dejar para el final de esta etapa el contarte lo sucedido con los policías en Perú.
Trayecto Lima-Trujillo, no más de 500km.
Primer peaje (las motos siguen sin pagar peajes). Me manda a parar un policía. Me dice que voy con exceso de velocidad al cruzar el peaje. "Pero señor, como voy a ir con exceso de velocidad si salí en primera y recien acabo de poner la segunda????". Licencia de manejar, pasaporte, documento de propiedad de la moto, etc. Veinte minutos de discusión y me deja marchar...
Cincuenta kilómetros mas adelante, me vuelven a parar.... Exceso de velocidad! "Pero vamos a ver señor, cargada como va la moto, en zona de curvas, como voy a ir rápido? sería de locos...." Pasaporte, licencia, etc etc etc.... Otros veinte minutos y me deja marchar....
Cien kilómetros más adelante, tercera vez que me mandan a parar en menos de hora y media. Control rutinario de documentación. "Señor, ya me han parado dos veces anteriormente y me han revisado todo, estoy en regla". "Esta es una vía preferencial y tenemos que revisar a los que circulan", me dijo. Pasporte, documentación moto, licencia y esta vez me pidio el seguro de la moto y que dijera literalmente "Peru". Como lo tenía todo en regla, me dejo partir...
En unos 100km más adelante cuarta parada. Ya se me subió el mal humor a la cabeza, ya está bien de tomarme el pelo. Se me acerca el "jefesito" con muy malas pulgas y me pide documentación advirtiéndome que iba con exceso de velocidad. Ahí si iba con más velocidad pero ya me daba igual. Una zona en medio del desierto, recta, sin población y con un cartel de 60km/h. Eso lo hacían para "recaudar fondos" de todos los que por allí circulábamos...
Yo le discutía que no iba con exceso de velocidad, que iba a 55km/h y como no tenía forma de demostrarlo sabía que no le quedaba otra que dejarme marchar. Me pidió toda la documentación que los anteriores me habían pedido incluso la cartilla de vacunaciones!!!!! Revisando mi documentación el "jefesito" le gritó a otro policía "para a ese que viene, dile que va con exceso de velocidad...." La madre que lo parió!!!!!!! Así es como los representantes de la ley funcionan en Perú. Una vez revisó toda la documentación y me hizo perder media hora, no le quedaba otra que dejarme marchar. No tenía ningún argumento para multarme. Entonces comenzó mi ataque?.
-"Todo bien Sr. Policía? No quiere tambien una partida de nacimiento? un certificado de bautizo? Quizás las notas de mi último curso escolar?".
-"No no, puede usted marchar", me dijo.
-"Sr Policía, hay algo personal contra mi moto y contra mí? No es normal que en menos de 300km me paren 4 veces!!!!"
- Solo son inspecciones rutinarias y todos los que circulan por esta zona están expuestos a ello.
- "Ah, ya... Pues mire Sr. Policía, se me está haciendo tarde, no quiero manejar en la noche por mi seguridad, mi destino es Trujillo. En lo que queda no pararé a ningún otro control policial. Me da igual que me manden a parar. No lo haré. No es una amenaza ni una advertencia, se lo pongo en su conocimiento para que comunique a sus compañeros que mi moto y yo estamos en regla."
- "Es su obligación detenerse o tendrá graves problemas" me dijo...

Primera, segunda, tercera, cuarta y quita velocidad. 130km/h y ya no hacía caso ni de las señales de velocidad. Me comenzó a "rebalar" todo esto, estaba tan cansado y molesto con policías...
Había salido desde Nazca y era una etapa de más de 1000km. Las nubes amenazaban lluvia y el sol estaba apunto de ocultarse.
No habían pasado 50km más y otro policía me manda a detenerme. Reduzco una marcha, dos, tres... pongo intermitente (soy el único que lo utiliza), y cuando estoy en el arcén vuelvo a acelerar y me despido con la mano. Pronto estoy otra vez a 130km/h. Me quedo mirando por los espejos retrovisores y el policía lo único que hacía era mirarme como me alejaba...
La luz se iba y yo manejaba rápido, necesitaba llegar a Trujillo antes de la noche. Era un contra-reloj.
Otros 50km y otra vez la policía me manda a parar. Sexta vez en 500km. Esta vez eran muchos policías, tenían varios vehículos y motos, no me iba a poder escapar. Reduzco una marcha, dos, tres... Todos los policías que allí estaban, unos cinco, estaban multando a algún conductor. Me voy acercando al policía que me mandó a parar y cuando estoy a su altura le digo "adios" con la mano y acelero lentamente. "Si me paran digo que pensé me estaba saludando", pensé.
No aparté los ojos de los espejos y ví como el policía salió rápido hacia otro policía y comenzó a hablar. Aparentemente no ocurrió nada más...
"Como me vuelvan a parar soy capaz de bajarme de la moto y comenzar a golpes con el policía", pensé.. jajajjajaj
Ya a unos 50km de Trujillo la noche me alcanzó, tuve que reducir la velocidad y llegué sano y salvo a la plaza de armas, en el centro de esa preciosa ciudad. Allí me alojé en el hotel "Libertador". Me hicieron un muy buen precio y me trataron super bien. Desde aquí quiero agradecer a Edith Márquez todas las atenciones que tuvieron conmigo. El hotel, además de ser precioso y con unos servicios extraordinarios, está ubicado en el centro de la ciudad, con lo que es muy recomendable para conocer bien la ciudad de Trujillo.

Sobre el tema de los controles policiales en Perú, tengo que contarte que hace algunos años cuando viajé en auto por allí, me pararon varias veces. Al final de darme vueltas y vueltas, me pedían una propina y con 1 o 2 dólares cerrabamos el "laborioso" proceso. Para mí, más que un mal trago, era una experiencia increible como la policía aceptaba olvidar la supuesta infracción con tan sólo 1 o 2 dólares.
Hoy en día, ya no es una anécdota el que me pare la policía, y me da mucha tristeza que estas injusticias ocurran, que gente que no puede pagarle unos dólares los sacrifiquen y que a otros que si pueden pagarles les dejen pasar. Así pues me empeñé en no pagar ni un solo dolar y así lo hice.
Desde mi salida en Trujillo, no hice caso a ningún otro policía. Me daba igual me dieran el alto una o diez veces. No me merecen ningún respeto.