sábado, 10 de abril de 2010

Un almuerzo maravilloso con mis grandes amigos...

Visitar Machala significa reencontrarme con mis grandes amigos, casi mi familia.
Guido y María, unas personas extraordinarias que siempre llevaré en mi corazón.

Nuestra cita obligada con el almuerzo, por supuesto ceviche y camarón... reventado, al ajillo.... da igual, esta buenísimo.

Charlas interminables, economía, medicina, motos, viajes y por supuesto política..
Guido y yo no coincidimos para nada en nuestras ideas... jajajaj

María, por su parte, siempre preocupada por mi viaje, por mis peligros, riesgos, etc. Despues de 30.000km aún no he conseguido que confíe en mi...

Un fuerte abrazo y aunque continúe en la ruta, siempre estarán conmigo