Te confieso que aunque sabía que no le iba a ocurrir nada malo, estaba incómodo, preocupado, pendiente de mi fiel compañera.
Nada más llegar al aeropuerto, directamente a la terminal de carga.
Allí comenzaron los problemas con la compañía de transportes que comentaré en próximos días según me den una solución a todo el conflicto que se creó.
Unas dos horas después ya escuchaba el sonido de Linda en tierras panameñas.
Con el depósito totalmente vacío llegué hasta la gasolinera. Para poder enviar a Linda en avión tuve que sacarle la gasolina. Una vez en Panamá, no hubo un alma caritativa que me diera medio litro, así que tomé la decisión de continuar adelante con el "olor" del combustible... y por suerte llegamos. Si se hubiera parado en medio de los barrios que atravezamos a la salida del aeropuerto, no se que nos hubiera ocurrido.... Barrios muy peligrosos y clasificados por la policía como puntos negros... Mejor olvidarlo.
La carretera perfecta, todo autopista que une el aeropuerto de Panama con la ciudad.
Según miraba en el horizonte no podía creer lo que estaba viendo.
Acostumbrado a una latinoamérica desordenada, llena de pequeñas casas de madera y estructuras no muy actuales, en el horizonte veía la ciudad de Panama adornada con edificaciones super modernas y altas.
Este no es el Panamá que yo conocía....
Wow.. increible como había evolucionado en tan solo 7 años!!!
No se ni cuantas fotos saqué porque no me lo creía.
Paraba en medio de la autopista sin pensar en el problema que me metería si la policía me veía.
Pero por suerte no nos cazaron...
Ese gran puente que une con Panama city es espectacular. Muy poca altura pero agua a ambos lados... Casi que da la impresión que flota sobre el mar.
Una vez instalado en el hotel, comienzo a recorrer la ciudad.
Primero el Panamá viejo. Es una zona antigua de la ciudad donde fue atacada por piratas. La conservaron tal y como quedó tras los ataques.
Allí casualmente conocí al embajador de España. Una persona extraordinaria y que mostró muchísimo interés por mi viaje. Era domingo y me invitó a la embajada al día siguiente. Lastimosamente estaba demasiado justo de tiempo y debía continuar el viaje....
Igualmente el consul de España en Houston le acompañaba y hemos quedado en reunirnos en esa ciudad en Agosto cuando la esté cruzando, para contarles del viaje y hacer un pequeño homenaje a la protagonista del viaje: Linda!
Más tarde me dirigí a unas islas que están unidas con un puente. Son antiguas islas que se utilizaban como cárcel para los prisioneros. Era algo parecido a Alcatraz en la bahía de San Francisco.
Hoy en día, donde habían cárceles y zonas de vigilancia, hay un precioso malecón, puertos deportivos, restaurantes y cientos de zonas de ocio..... Menudo cambio!